El manto de los perros no solo les protege del frio en invierno, sino que también actúa como protector frente a los rayos del sol en verano, evitando quemaduras. Por eso, cuando cortamos el pelo a determinadas razas para protegerlos del calor, estamos haciendo todo lo contrario.

Ante este problema, es importantísimo que nos aseguremos de que podemos cortar el pelo a nuestro can sin ninguna consecuencia. No debemos tratar a nuestro amigo como si fuera un humano porque no lo es. Lo que a ti te va bien, para él puede ser un problema.

No obstante, aunque son minoría, sí hay algunas razas de perros que necesitan o es aconsejable cortarles el pelo, principalmente por comodidad e higiene. Para saber si tu perro es uno de ellos, debes conocer el tipo de pelo que tiene, o bien, consultar a tu veterinario.

Además, debes recordar que, aunque es posible cortar el pelo a tu can desde casa, debes tener mucho cuidado, pues se requieren unos conocimientos básicos para no arriesgar la salud de tu amigo y perjudicar su piel. La mejor opción siempre será acudir a un profesional en la materia.

En primer lugar, nunca debes rapar a ningún perro por completo. Debes respetar al menos unos centímetros de pelo para protegerle del sol. Además, si le rapas, alterarás el equilibrio natural del can, pues su organismo está preparado para autorregular su temperatura con el manto.

Las razas de mucho pelo, como la raza Chow-chow, Spitz, algunos Golden Retriever, etc. no deben experimentar cortes de pelo, aunque pueda sonar extraño. De lo contrario, conseguirás que, además de quedar desprotegidos, su manto de pelo se debilite y deje de crecer.

Lo mismo ocurre con perros de pelo corto y duro, como las razas de Pastor Alemán, Husky, Pastor Belga y Alaskan Malamute, por ejemplo. A estos perros no debes cortarles el pelo en ningún momento ya que quedarían desprotegidos frente al frio y los rayos UV.

Luego existen algunos tipos de pelo y razas que sí permiten estos cortes, como las razas Bichón, Schnauzer, Caniche, Yorkshire, Fox Terrier, Cocker, Airedale, Teckel, etc. La característica que diferencia a estas razas de las demás es que les crece el pelo durante todo el año.

Dado que el crecimiento del pelo de este último grupo de perros es constante, dos o tres cortes anuales les vendrán muy bien. De hecho, no es necesario que esas épocas del año correspondan solo con los meses de calor, aunque es lo más habitual.

A continuación, mostramos los tipos de corte más comunes según las razas. Así, podrás poner a tu amigo canino aún más guapo, siempre y cuando hayas analizado con detenimiento sus características y preguntado a tu veterinario si se le puede cortar el pelo.

Este es el más popular para los Poodle. Se caracteriza por lucir unos graciosos pompones en los tobillos de las cuatro patas. La parte superior y el abdomen quedan al descubierto.

En este caso, el pelo se deja muy corto, incluso, en ocasiones, afeitado. En cambio, la barba y cejas solo se retocan un poco. Este look es típico de la raza West Highland White Terrier.

Los perros de raza Yorkshire suelen lucir este estilo con mucha gracia. Se trata de recortar el pelo hasta apenas dejar unos centímetros de manto, tal y como lucen cuando son cachorros.

Aunque como su propio nombre indica, este tipo de corte es típico de la raza Pequinés, muchas otras razas de perros pequeñas también se apuntan a este estilo de pelo.

Para conseguirlo, se debe dejar crecer el pelo hasta similar unas orejas caídas y largas como la de los Pequineses. A continuación, se rasuran un poco las patas y ¡Listo!

En este caso, los perros que se llevan el protagonismo con este corte son los Pomerania, ya que de por sí el color de su manto recuerda a los leones. La parte trasera queda casi afeitada, con un poco de pelo, parecido al continental, pero sin pompones.

Lo más característico de este peinado es que el pelo de la cabeza y pecho se deja largo, imitando la melena de un león. No obstante, los Pomerania no son perros que precisen de un corte de pelo, por lo que no es aconsejable. ¡Su pelo al natural ya es como el de un león!

Aunque este look no es muy conocido, merece la pena incluirlo aquí por lo tierno que es. Se trata de un corte específico para perros con mucho pelo, cabeza redondeada y tamaño pequeño, como los caniches. El resultado es de aspecto esponjoso en la cabeza y orejas.

Característico del norte de América, este peinado se caracteriza por un marcado contraste entre las patas, con bastante pelo cortado de manera degradada, y el resto del cuerpo, con el pelo corto.